En el último tiempo, los bancos se han mostrado dispuestos a otorgar créditos hipotecarios hasta treinta años. No obstante, el paradigma actual de oferta y demanda ha hecho que esta opción se extienda incluso hasta los cuarenta años.

Previo a la aparición de estos créditos especializados, las inmobiliarias ya se habían percatado de que parte de las ventas iban dirigidas a un sector específico de la población, principalmente para el denominado segmento “millenial”, quienes compran departamentos pequeños con buena conectividad, costo accesible y de rápido arriendo.

Con esta nueva posibilidad de créditos, los “millenials” o “Generación Y” (los nacidos entre 1981 y 1999), ven cubiertas sus necesidades de invertir rápidamente y que la vivienda pueda pagarse sola sin gran esfuerzo.

Este segmento de personas entre 20 y 38 años, son apasionados por la tecnología, la cultura pop y las tendencias. Valoran su tiempo y si la vivienda es para ellos, no planean que su hogar sea para siempre, pues siempre están en movimiento, ya sea por trabajo o viajes. Por esta razón, preferirán lugares más funcionales y con espacios comunes equipados que les permitan maximizar el uso de su tiempo libre.

Este fenómeno se diferencia en parte de lo que sucede en el público inmobiliario tradicional, la llamada “Generación X” (nacidos entre 1969 y 1980), quienes, con la idea instalada de la “casa propia”, son más conservadores y cautos a la hora de elegir viviendas para vivir en ellas o arrendarlas.

Este es el nuevo paradigma que están enfrentando muchas de las inmobiliarias, por lo tanto, es importante tener ojo crítico con las nuevas tendencias sociales y ver estos cambios como oportunidades.