¿Qué es un plan regulador?

Cada comuna cuenta con uno y es de vital importancia conocerlo para saber cómo se mantendrá la zona donde estamos invirtiendo.

 

 

El plan regulador es un instrumento de planificación que ordena y regula el desarrollo urbano de cada comuna a través de un conjunto de normas que establece cómo, cuánto y dónde se puede construir.

 

Así, define dónde se pueden instalar colegios, restaurantes, hospitales, cementerios, y todo tipo de edificaciones que impactan directamente en la vida de las personas que viven en cada zona.

 

Para saber cómo variará el valor de una propiedad, es muy importante conocer el plan regulador de la comuna donde se inserta. Sin embargo, el plan se evalúa al menos cada 5 años, por lo que puede ser actualizado y las condiciones cambiarán. Es por eso que hay que mantenerse informado sobre el plan regulador de la comuna donde cada uno vive.

El desafío de crear espacios comunes en sintonía con la vida de hoy

Si vives en un edificio, es probable que no conozcas a tus vecinos, aunque lleves años viviendo en el mismo lugar. Muchas veces el tiempo juega en contra y nos limita a relacionarnos con otras personas dentro del mismo recinto. Un incentivo para compartir, conocer y socializar con tus vecinos son los espacios comunes, que la mayoría de los edificios ofrece.

 

¿Cuáles son los beneficios de contar con estos espacios?

  • Como mencionamos anteriormente, socializar para conocer mejor a las personas que viven en tu edificio.

 

  • Disfrutar de diversas actividades en un espacio seguro, ya que el ingreso a estos lugares es de exclusividad de quienes los habitan.

 

  • Otra ventaja es no tener que salir del edificio para ejercitarte, ya que el gimnasio está adentro.

 

  • Áreas verdes que aportan a la calidad de vida, en armonía con el medio ambiente e incorporando criterios más sustentables.

 

En Norte Verde contamos con espacios comunes para incentivar la convivencia entre los vecinos, creando lugares de encuentro ambientados para mejorar la calidad de vida. En Edificio Ecuador, por ejemplo, está contemplado un salón gourmet con vista panorámica, perfecto para lograr conectar alrededor de una gran mesa. En Ñuñoa Vida, un puente de doble altura conectará ambas torres con un lounge y un gimnasio. En Albora, en tanto, una terraza verde contará con un quincho y espacios para hacer picnic mirando hacia el Parque O’Higgins.

 

Hoy en día, los propietarios no solo compran un departamento, sino también las áreas comunes que permiten generar más vida en conexión con las personas.

Nuevas normativas y precio de las viviendas

Durante estos días se está discutiendo el reglamento para la Ley de Aportes al Espacio Público, cuyo objetivo es lograr mitigaciones sobre la base de que todos los proyectos inmobiliarios generan externalidades en su entorno. Los aportes se basarán en la densidad y destino del proyecto y serán entregados a la comuna donde se emplazarán. Si bien es una normativa enfocada en mejorar los espacios públicos, aún no se ha definido cómo ni de qué forma se invertirán estos recursos.

 

Existe otra nueva norma creada para mejorar las condiciones de las personas: la Ley de Ductos, que obliga a las inmobiliarias a encargarse de todo el cableado para los servicios telecomunicacionales. Esta normativa tiene dos grandes ventajas: por una parte, no habrá contrato de exclusividad con una empresa determinada y, por otra, todo el edificio estará conectado. Sin embargo, esto también aumenta el costo de construcción en forma importante y el costo de mantención de los edificios, que ahora quedarán a cargo de las comunidades y no de las empresas que daban este servicio.

 

Ambas iniciativas han producido un impacto relevante en los costos de construcción. Si bien el reglamento de aporte al espacio público aún no se ha aprobado, puede llegar a afectar el precio final de un departamento en un 8% del valor de venta. Por otro lado, la nueva ley de ductos, que está en vigencia, está impactando un 2,1%, por lo que sólo producto de estas iniciativas un departamento que hace un par de meses valía UF 2.000 ahora lo encontraremos en 2.200, un 10% más alto.

 

Ante esta realidad, me parece de suma importancia que al momento de crear una de estas iniciativas se regule correctamente y se evalúe todas las posibles implicancias que tendrán, ya que, aunque el objetivo final es mejorar la calidad de vida de todos los chilenos, tienen un impacto en los precios de las viviendas, que siguen subiendo día a día y no parecen estar ni cerca de estabilizarse con la creatividad de las nuevas leyes.6

 

Roberto Bascuñán W.
Gerente General Inmobiliaria Norte Verde

Cambio de legislación sobre las azoteas

Hasta enero, solo un 20% de las azoteas podían ser utilizadas para equipamientos exteriores, dejando un 80% de espacio sin utilizar. Esto no tenía sentido y mostraba un atraso de nuestro país en tendencias sustentables frente a otras naciones como Inglaterra, Estados Unidos y China, que aprovechan las azoteas para poner plazas en alturas, paneles solares y áreas de recreación.

 

Las ciudades crecen aceleradamente, pero en vez de hacerlo hacia los lados, deben hacerlo hacia arriba, aprovechando al máximo los espacios, disminuyendo el impacto ambiental. Y este año, por fin, el Ministerio de Vivienda y Urbanismo modificó la Ordenanza General de Urbanismo y Construcciones para permitir que se use el 100% de las azoteas. Con esto, podemos empezar a construir un Chile más verde, y nosotros ya pusimos nuestro granito de arena con Rondizzoni, que tendrá una plaza en altura en su azotea, como una continuación del Parque O’Higgins.

El otro dividendo

La problemática del ahorro energético se ha ido incrementando con el crecimiento de los asentamientos y los desafíos de la sustentabilidad del desarrollo territorial. La eficiencia energética es hoy un tema fundamental a nivel mundial, ya que representa un costo muy elevado en relación a los ingresos económicos que perciben los núcleos familiares por hogar.

 

El tiempo que toma trasladarse dentro de la ciudad implica un costo económico y social cada vez mayor, ya que las zonas de crecimiento urbano poseen escasa cohesión funcional y los núcleos de servicios no alcanzan a cubrir el radio de expansión de la población y sus necesidades.

 

En este contexto, el gasto energético por desplazamiento representa casi la mitad de energía consumida por una población y sus destinos comienzan a ser fuente de observación y discusión. En 2012, realizamos una encuesta al respecto a 317 habitantes de diferentes áreas de la ciudad de La Serena (Chile), donde se observó que los destinos de mayor frecuencia fueron: el trabajo (28%), los establecimientos educacionales (27%) y el supermercado (23%). Los desplazamientos que generan mayor gasto son: el trabajo (45%), el supermercado (19%) y los establecimientos educacionales (16%).

 

De acuerdo a la encuesta realizada, el traslado al trabajo, a los centros educacionales de nuestros hijos y al comercio, representan una fuente constante de gasto energético plenamente posible de disminuir mediante adecuadas políticas habitacionales, donde se incentiven mayores densidades y menores exigencias de automóviles en los centros urbanos, fomentando así el uso mixto donde convivan las viviendas con los servicios.

 

El gasto familiar por concepto de combustible o movilización muchas veces supera el dividendo de nuestras viviendas, por lo que poner atención a la ubicación de esta en relación a nuestra fuente laboral y colegios puede ser una verdadera economía a largo plazo.

 

Francisco Bascuñán Walker
Arquitecto y Director Ejecutivo Inmobiliaria Norte Verde

Una nueva oportunidad para mejorar la ciudad

El anuncio realizado por el Presidente Sebastián Piñera sobre la construcción de la Línea 10 del Metro de Santiago es una gran noticia: habrá una mejor y mayor conexión interurbana, lo que aportará a la descongestión de la ciudad al disminuir los viajes motorizados, con su consecuente aporte al medio ambiente y la calidad de vida de las personas. 

Hoy en día, muchos santiaguinos viven en comunas poco conectadas, donde el transporte público es escaso y/o poco eficiente. Por ello, se ven enfrentados a tiempos de desplazamiento entre sus hogares y su lugar de trabajo o estudios que pueden exceder las cuatro horas diarias (dos por tramo). Además, gran parte de ellos viven en barrios sectoriales: monofuncionales y poco diversos, donde no cuentan con servicios de ningún tipo cercanos a su vivienda, ya que son grandes extensiones habitacionales. De esta forma, se presenta una organización de relaciones lejanas: acceder a un servicio cualquiera representa un largo recorrido en automóvil o transporte público motorizado. Esta rutina diaria es insostenible y está mermando la calidad de vida de las personas.

 

La creación de la Línea 10 del Metro genera una nueva oportunidad para los santiaguinos, ya que, en virtud de una mejor comunicación, al menos 100.000 habitantes que hoy viven en barrios sectoriales decidirán vivir dentro del área cubierta por esa red, es decir, a no más de cinco cuadras de cada estación.

 

Pero hay que tener cuidado. Si se decide privilegiar la construcción de casas en estos nuevos polos, muy pocas personas podrán verse beneficiadas con la expansión del Metro, ya que por cada casa donde vive una familia se puede construir un edificio donde vivan, al menos, 25. Si consideramos que la cantidad de suelo es limitado, se estaría despilfarrando el terreno disponible.

 

Por eso, lo decisión más inteligente en este caso es crear barrios densos en altura. Si queremos permitirle a estos 100.000 chilenos que aumenten su calidad de vida al mudarse a terrenos aledaños a las nuevas estaciones de metro, el camino a seguir son los edificios, no las casas. Estos edificios deben tener dos características importantes: ser de mediana altura, para privilegiar la comunidad y la vida de barrio; y tener locales comerciales en su primer piso, para diversificar la zona.

 

Diseñar barrios densos y diversos permitirá que una gran cantidad de personas habiten en el área por donde pasará la nueva línea del Metro, minimizando la cantidad de viajes motorizados que hoy realizan para acceder a los servicios básicos y mejorando la calidad de vida de cada uno de ellos, ya que estarán más conectados e integrados con la ciudad. Además, aportará a reducir la contaminación ambiental que hace años se ha tomado la capital de nuestro país. La creación de una ciudad más inteligente y sustentable está en nuestras manos, no desaprovechemos la oportunidad.

 

Francisco Bascuñán Walker, Arquitecto y Director Ejecutivo Inmobiliaria Norte Verde

Ventajas de los edificios de baja densidad

Hoy en día se ha instalado una nueva e interesante tendencia en las grandes urbes de Sudamérica, especialmente en Lima y Santiago de Chile: edificios de mediana o baja altura, que ofrecen departamentos en comunidades más pequeñas y están ubicados en barrios consolidados.

 

 

 

Atrás va quedando el modelo que parecía promover la altura como sinónimo de estatus en pos de un modelo que es más consciente, que suma ventajas y beneficios no sólo para quien los habita, sino también para la ciudad donde se emplazan, a través de un diseño urbano más sustentable en el tiempo.

 

 

 

Esto se debe a un nuevo modelo de desarrollo urbano en donde términos como regeneración, redensificación y reciclaje, han empezado a formar parte recurrente del discurso urbanístico más consciente para intervenir ciudades.

 

 

 

Re-hacer la ciudad sobre la ciudad

En países como Francia, por ejemplo, se oficializó el concepto de Renouvellement urbain (Renovación urbana) que promueve la idea de rehacer la ciudad sobre la ciudad: orientar el urbanismo hacia el mejoramiento y la dinamización del tejido urbano ya existente. Esto se traduciría en un mejor desarrollo y funcionamiento de la ciudad, que ahorraría espacios y energía en sitios urbanos degradados.

 

 

 

Roberto Bascuñán, Gerente General de Inmobiliaria Norte Verde, ha declarado que esta creciente propuesta (construir en baja densidad) suma muchas ventajas:

“Una de ellas es que, al tratarse de comunidades pequeñas, es más fácil la organización de los residentes y la administración del inmueble. En edificios con pocas unidades, la conserjería tiene un mejor control de quienes salen e ingresan y los mismos vecinos se cuidan más entre ellos”, lo que evidentemente aumenta el sentido de pertenencia a una comunidad, hecho que se traduce en una mayor seguridad.

 

 

 

Frente a la manifiesta necesidad de densificar el suelo urbano existente, Norte Verde ha intentado mantener una escala adecuada a los requerimientos de los contextos urbanos, transformando en ejemplos sus propuestas arquitectónicas, ya que permiten la habitación conjunta de varias familias en un mismo terreno, pero manteniendo una baja densidad general.

 

 

 

La propuesta de baja densidad viene acompañada, además, por contundentes propuestas en sus fachadas y espacios interiores, que manifiestan una búsqueda consciente por generar buenos espacios que mejoren la calidad de vida de sus habitantes y de la zona en donde se proyectan.

Un gran reconocimiento a Rengifo

Por segundo año consecutivo, un edificio de Norte Verde fue nominado a los PAU (Premio al Aporte Urbano) de la Cámara Chilena de la Construcción. En esta ocasión, el reconocimiento fue para Rengifo, en la categoría Mejor Proyecto Inmobiliario de Altura Media. Este proyecto de cinco pisos es el primer edificio habitacional que se construye en el centro histórico de La Serena desde 1995.

 

 

Por segundo año consecutivo, un edificio de Norte Verde fue nominado a los PAU (Premio al Aporte Urbano) de la Cámara Chilena de la Construcción. En esta ocasión, el reconocimiento fue para Rengifo, en la categoría Mejor Proyecto Inmobiliario de Altura Media. Este proyecto de cinco pisos es el primer edificio habitacional que se construye en el centro histórico de La Serena desde 1995.

 

 

“Estuvimos tres años trabajando intensamente para conseguir los permisos con el Consejo de Monumentos Nacionales. Fue un proceso largo, pero con paciencia lo logramos”, contó Francisco Bascuñán, director y arquitecto de Norte Verde.

 

 

Además de la tramitación, se hicieron varias jornadas de integración del proyecto con la comunidad para ver el impacto que iba a tener en ellos y para incentivar a salir del estado de abandono en el que estaba el barrio.

 

 

Ubicado en el corazón de La Serena, Rengifo está totalmente conectado con su entorno. Tiene un patio colonial, las ventanas cuentan con un premarco de acero y se usaron baldosas en vez de porcelanato: todo para estar en armonía con el contexto en el que se emplaza el edificio.

 

 

“Quisimos generar nuevas dinámicas en un sector que estaba deteriorado reinterpretando conceptos patrimoniales. La potencia de un proyecto como el nuestro, que tiene locales comerciales en el primer piso y unidades habitacionales que dan a la calle, es un verdadero aporte urbano”, aseguró Sergio Pereira, arquitecto a cargo de este proyecto.

 

 

Con todos estos detalles, Norte Verde creó el primer edificio habitacional en el centro de La Serena de este siglo. Ahora, más personas que trabajan en el centro pueden vivir en el mismo sector, minimizando el tiempo de traslado de un lugar a otro.

 

 

“Nosotros siempre tratamos de buscar que nuestros proyectos sean un aporte. Cada proyecto es pensado según su contexto y el usuario particular. El objetivo es, siempre, mejorar la calidad de vida de las personas”, finaliza Sergio Pereira.

Un gueto vertical NO es un barrio vertical: Esta es la diferencia

Las ciudades siguen siendo un polo de atracción para las familias contemporáneas. Los datos de la ONU ratifican que para el 2030 el 80% de la población de Latinoamérica vivirá en las urbes y cuando se trata de Santiago de Chile se prevé que la población sobrepasará los 10 millones.

 

 

Esta situación ha hecho que surjan buenas y malas prácticas como respuesta a la excesiva demanda que existe de viviendas en el gran Santiago e incluso en otras zonas del país.

 

 

Guetos verticales

Es sabido, que una de las practicas que surgieron sin control y que se han transformado en la pesadilla de muchos son los guetos verticales, ese tipo de construcciones que concentran numerosas viviendas en altura generando hiperdensidad, muchos arrendatarios, ruina prematura del edificio y un efecto negativo en su entorno.

 

 

Este tipo de construcciones son el resultado de intentar una solución descriteriada en un territorio segregado y que involucra decisiones políticas y económicas, que redundan en una pérdida del estado de bienestar y la calidad de vida de las personas, quienes intentan con desesperación acceder a una oferta que se ve encarecida, poco regulada y con falta de eficiencia.

 

 

Si bien la palabra gueto tiene connotaciones raciales, cuando en Chile se aplica este tipo de terminología refiriéndose a un tipo de construcción de vivienda, lo que se busca es resaltar la marginación en la que viven su día a día las personas que pagan por este tipo de departamentos, haciéndoles caer en un círculo de empobrecimiento, incomodidad y un aprovechamiento de la escasez de oferta que ha obligado a los chilenos  a bajar sus expectativas por intentar acceder a un espacio que no los margine de los centros urbanos.

 

 

Seamos claros: un gueto vertical limita la calidad de vida de sus habitantes, hace prácticamente imposible el mantenimiento del edificio y carece de garantías de solvencia en la inversión a largo plazo.

 

 

Barrio Vertical

Como respuesta a la alta demanda de viviendas, en Norte Verde hemos diseñado una respuesta consciente, que busca mejorar la calidad de vida de las personas que nos elijan como su vivienda y que genera un impacto positivo en el lugar en donde se emplazan nuestros proyectos, beneficiando a la ciudad y la comunidad.

 

 

¿Qué implica diseñar un barrio vertical?

1.- Edificios más humanos: Es muy importante para una buena convivencia y calidad de vida, tratar de vivir en un edificio de baja densidad, menor cantidad de hogares y/o departamentos.  Norte Verde apela a una mejor calidad de vida y como tal realiza proyectos espaciosos, poco densos y siempre integrando áreas verdes, tratando de no sobrepasar las densidades de nuestros antiguos barrios.

 

2.- Espacios comunes pensados como puntos de encuentro o plazas de barrio: Los gastos comunes suelen incrementarse por instalaciones que poca gente usa y son difíciles de administrar y mantener.  Norte Verde ofrece espacios comunes ambientados para mejorar la calidad de vida, ya sea con árboles y naturaleza, o con vista en terrazas panorámicas. Lugares de encuentro agradables para conversar y pasar un buen momento.

 

3.- Plusvalía de la Inversión: Ofrecemos ubicaciones privilegiadas y diseños de vanguardia que aseguran una inversión a largo plazo y que son fáciles de mantener en el tiempo, adelantándose a los tiempos que vienen. La exclusividad siempre va acompañada de plusvalía.

 

4.- Proyectos más Verdes: Tenemos el desafío de lograr diseños más verdes, en armonía con el medio ambiente e incorporando criterios más sustentables. La incorporación de jardines y arboles como parte de la estructura es un sello en nuestros edificios.

 

5.- La importancia de la Luz Natural: En Norte Verde tenemos el especial cuidado de diseñar los pasillos con luz natural y hacer de la llagada a tu hogar una sensación de tranquilidad y calidad merecida.  Mantenemos diseños en donde la luz natural es protagonista y que dotan de calidez a tu cotidianidad, ayudando también a ahorrar energía.

 

6.- Departamentos para la vida contemporánea: Los tiempos cambian y las familias actuales se constituyen con menos integrantes, pero con miembros más activos socialmente. Norte Verde reflexiona constantemente en las nuevas formas de vivir y las traduce en espacios pensados para compartir las actividades con la pareja, para cocinar integrados a la familia y para trabajar a distancia, optimizando los espacios interiores y creando atmosferas más favorables para vivir mejor. 

 

7.- La Seguridad de una comunidad reducida. “Todos nos conocemos”. El hecho de que sea una comunidad pequeña facilita los acuerdos para mantener el estándar de seguridad requerido y reduce la posibilidad de que desconocidos ingresen en el exclusivo círculo de vecinos. Lo anterior se puede complementar con las tarjetas de acceso personalizadas para cada propietario, incorporando un grado más de seguridad al edificio.

Escrito por: Andrea Peña

Nueva vida a barrios consolidados en Santiago

Cada vez más, podemos ver en las grandes urbes de Sudamérica, especialmente en Lima y Santiago de Chile una nueva e interesante tendencia: los edificios de mediana o baja altura, que ofrecen departamentos en comunidades más pequeñas, ubicados en barrios consolidados.

Cada vez más, podemos ver en las grandes urbes de Sudamérica, especialmente en Lima y Santiago de Chile una nueva e interesante tendencia: los edificios de mediana o baja altura, que ofrecen departamentos en comunidades más pequeñas, ubicados en barrios consolidados.

Atrás va quedando el modelo que parecía promover la altura como sinónimo de estatus en pos de un modelo que es más consciente, que suma ventajas y beneficios no sólo para quien los habita, sino también para la ciudad donde se emplazan, a través de un diseño urbano más sustentable en el tiempo.

Esto se debe a un nuevo modelo de desarrollo urbano en donde términos como regeneración, redensificación y reciclaje, han empezado a formar parte recurrente del discurso urbanístico más consciente para intervenir ciudades.

Re-hacer la ciudad sobre la ciudad
En países como Francia, por ejemplo, se oficializó el concepto de Renouvellement urbain (Renovación urbana) que promueve la idea de rehacer la ciudad sobre la ciudad, esto quiere decir que orientar el urbanismo hacia el mejoramiento y la dinamización del tejido urbano ya existente es el objetivo del nuevo modelo de construcción. Esto se traduciría en un mejor desarrollo y funcionamiento de la ciudad, que ahorraría espacios y energía en sitios urbanos degradados.

En tanto, Roberto Bascuñán, gerente general de Inmobiliaria Norte Verde, ha declarado que esta creciente propuesta (construir en baja densidad) suma muchas ventajas:
“Una de ellas es que, al tratarse de comunidades pequeñas es más fácil la organización de los residentes y la administración del inmueble”. Esto quiere decir que “con respecto a los gastos comunes, existe un mínimo aceptable de unidades de departamentos para que no se eleven, pero sobre esa cantidad la administración se hace ineficiente, disminuyendo así la capacidad de resolver el gran volumen de problemas de la comunidad y bajando la plusvalía por poca o nula mantención”.

Además, agrega que “En edificios con pocas unidades la conserjería tiene un mejor control de quienes salen e ingresan y los mismos vecinos se cuidan más entre ellos”, lo que evidentemente aumenta el sentido de pertenencia a una comunidad, hecho que se traduce en una mayor seguridad.

Edificación vertical como respuesta a la construcción urbana desmedida
Considerando esto y el modelo estructural que plantea la arquitectura de los proyectos de Norte Verde, en donde los espacios comunes, balcones, etc., promueven espacios de encuentro que favorecen la convivencia, la vida colectiva, el conocimiento e interacción cotidiana entre los vecinos, se plantea una verdad indudable: el modelo de construcción de baja densidad es una acción reactiva en contra de la extensión urbana desmedida.

Es necesario tener en cuenta que la densidad, y por consiguiente, la forma en que se ocupa o habita un espacio es una cuestión cultural y, por lo mismo, la forma cómo se construyen viviendas, se ha convertido en un aspecto central del diseño urbano y la colectividad.

Frente a la manifiesta necesidad de densificar el suelo urbano existente, Norte Verde ha intentado mantener una escala adecuada a los requerimientos de los contextos urbanos, transformando en buenos ejemplos sus propuestas arquitectónicas, ya que permiten la habitación conjunta de varias familias en un mismo terreno, pero manteniendo una baja densidad general. La propuesta de baja densidad viene acompañada, además por contundentes propuestas en sus fachadas y espacios interiores, que manifiestan una búsqueda consciente por generar buenos espacios que mejoren la calidad de vida de sus habitantes y de la zona en donde se proyectan.

Escrito por: Andrea Peña
Canal de denuncias NV
De acuerdo con lo dispuesto por la Ley N° 20.393 sobre Responsabilidad Penal de las Personas Jurídicas y alineados con nuestro compromiso hacia la transparencia y el bienestar integral de todos nuestros stakeholders, en Norte Verde hemos establecido un canal de comunicación especial, conocido como ''Canal de Denuncias".
Este canal está diseñado para que trabajadores, ejecutivos, directores, asesores, contratistas, subcontratistas, proveedores, clientes y terceros tengan la facultad de reportar y/o consultar sobre situaciones, comportamientos, anomalías o faltas a los valores y principios que rigen nuestro Código de Ética, así como a otras normativas y políticas internas, la Ley RPPJ, o cualquier otra legislación o normativa aplicable en el territorio nacional.
El Canal de Denuncias garantiza la confidencialidad y el anonimato de los denunciantes, en estricta conformidad con las disposiciones legales vigentes.
Ingresa aquí